Habían quedado sepultados bajo los escombros de su vivienda. Un milagro de amor en medio de la tragedia. Los efectos de los terremotos que tuvieron lugar en Turquía y Siria el pasado lunes 6 de febrero son devastadores. El número de víctimas no deja de crecer y las pequeñas historias que se van conociendo resultan extremadamente conmovedoras.
Es que a pesar de que los rescatistas trabajan contrarreloj, con prisa y sin pausa, las duras condiciones climáticas y el tiempo transcurrido no juegan a favor de ellos.Sin embargo, como suele ocurrir, siempre hay casos que suman esperanzas; "milagros" que se hacen realidad y nos convocan a creer en la fuerza del amor. Esta es una de esas historias.
“La niña de 7 años que mantuvo su mano sobre la cabeza de su hermano pequeño para protegerlo mientras estuvieron bajo los escombros durante 17 horas ha logrado salir a salvo. Veo que nadie comparte. ¡Si ella estuviera muerta, todos compartirían! Comparte positividad…”.
Este tuit, que celebra la vida en medio de la tragedia, fue publicado por Mohamad Safa, representante de Naciones Unidas.
Y se refiere al caso de los dos pequeños que permanecieron bajo los restos de su vivienda durante 17 interminables horas hasta que pudieron ser rescatados.
Las imágenes son enternecedoras. La niña no sólo cuidó a su hermanito menor protegiéndolo durante todo ese tiempo sino que lo tranquiliza y lo consuela dulcemente mientras ambos son liberados por los socorristas.
