El intendente de Durazno, Carmelo Vidalín, anunció el lunes que el río Yí en su paso por la ciudad se estabilizó en los 10,60 metros sobre su nivel habitual, luego de una crecida que lo llevó a alcanzar un pico de 10,70 metros durante la madrugada.
"Hasta aquí llegó su furia", expresó Vidalín en referencia al río, y agregó que se espera que el mismo continúe algunas horas más quieto antes de iniciar su lenta retirada.Actualización: a las 18:00 del lunes la medición era 10:54 m, descenso de 1 cm/h.
El jefe comunal recordó que el viernes pasado se solicitó la evacuación de vecinos que se encontraban en zonas por debajo de la cota 10,50 y posteriormente de aquellos ubicados en zonas que rondaban los 10,80 metros, marca que afortunadamente no se llegó a alcanzar.
Flavio Scott, coordinador del CECOED, quien fuera elogiado por Vidalín por su dedicación en la atención de la emergencia, informó que el río desplazó a más de 2500 personas, de las cuales 247 fueron evacuadas y el resto se autoevacuó.
Las autoridades comenzaron a pensar en el operativo retorno, el cual esperan sea seguro y se realice en coordinación con el Ministerio de Salud Pública (MSP), debido a la proliferación de mosquitos en las áreas inundadas, en un contexto local con dos casos de Dengue autóctono y 12 sospechosos.
El Dr. Javier Bessonart, por su parte, instó a la población a tomar medidas de prevención para evitar la proliferación de mosquitos, como eliminar criaderos de agua estancada, lo que será apoyado por los equipos que fumigarán las zonas hasta donde llegó el agua.
El intendente de Durazno agradeció a la población por su colaboración durante la emergencia y al personal de todos los organismos que participaron en la atención de la misma.
