La presidenta en ejercicio, Carolina Cosse, valoró el trabajo articulación público-privada para profundizar la política de vivienda y consideró que el Estado es un “garante de derechos” en esta materia. Durante la inauguración de la Feria de la Construcción, subrayó la “estrategia clara, coherente y de largo aliento” impulsada por el Gobierno para que la vivienda sea “el punto de partida para el desarrollo personal y colectivo”, y no una “meta inalcanzable”.
La Feria de la Construcción reúne a 336 empresas, 65 de ellas extranjeras, y unas 2.000 marcas relacionadas con el sector. Es la edición más grande hasta el momento y se desarrolla en el predio de la Rural del Prado, hasta el 19 de octubre.En la noche de este lunes 15, Cosse encabezó la inauguración de la muestra acompañada por la ministra de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Tamara Pasyero, con quien recorrió los diferentes stands. La iniciativa también cuenta con el apoyo del Banco República y el Congreso de Intendentes.
Tras felicitar a los organizadores de la feria, dijo conocer la importancia que tiene este espacio para el desarrollo del país. “Es un punto de encuentro entre visiones, experiencias y compromisos que tienen como horizonte común el progreso del Uruguay”, señaló.
Añadió que este sector es clave para cualquier sociedad porque es un “motor de desarrollo económico, generador de empleo, dinamizador de la inversión y pieza clave de la calidad de vida de nuestra gente”.
Cosse consideró que el sector está vinculado al derecho humano fundamental de la vivienda digna y a un hábitat adecuado. “Por eso, el trabajo articulado entre el Estado, el sector privado, la academia, los sindicatos y la sociedad civil, es imprescindible para avanzar en los desafíos que el Uruguay tiene adelante”, indicó.
La presidenta en ejercicio valoró la “estrategia clara, coherente y de largo aliento”, del Gobierno, que entiende a la política de vivienda, no como un conjunto de programas aislados, sino como “una herramienta transformadora del territorio, promotora de la inclusión social y motor del desarrollo sostenible”, sostuvo.
También habló del Estado como garante de los derechos de vivienda y de consolidar nuevas formas de cooperación público-privada, que potencien la inversión, mejoren la eficiencia y multipliquen el alcance de las políticas. En ese sentido, dijo que el sector privado tiene un conocimiento “muy valioso” y el Estado tiene la responsabilidad de orientar esas capacidades hacia objetivos de equidad, cohesión social, y desarrollo territorial. “Cuando ambas dimensiones se encuentran, el país gana”, sostuvo.
Y añadió: “Debemos asegurar que la vivienda sea el punto de partida para el desarrollo personal y colectivo, y no una meta inalcanzable para quienes más la necesitan”.
“El camino es el que estamos trazando juntos: un Estado fuerte, moderno, comprometido; un sector privado innovador, y socialmente responsable y una sociedad organizada, participativa y consciente de que el derecho a la vivienda es pilar de la vivienda y la justicia social”, destacó.
Paseyro, en tanto, recordó que el Plan Quinquenal de Vivienda presentado en el proyecto de Ley de Presupuesto enviado por el Gobierno para la aprobación del Poder Legislativo, prioriza a las poblaciones vulnerables y en especial, a las personas en situación de calle. Para eso el gobierno activó un operativo especial y ahora se trabaja en conjunto con el Ministerio de Desarrollo Social, porque “la materialidad de la vivienda no es suficiente, es un valor importante” para la vida, señaló.