Un sistema solar instalado por estudiantes de UTEC Durazno empezará a generar energía en el Liceo Impacto en 2026

0

Siete estudiantes de segundo año de la carrera de Energías Renovables de la Universidad Tecnológica realizaron su práctica pre-profesional en el Liceo Impacto de Durazno. La iniciativa unió aprendizaje técnico con compromiso social y se enfrentó a los desafíos logísticos y técnicos propios de una obra de ingeniería.

En el marco de un convenio de cooperación entre UTEC y el Liceo Impacto de Durazno, un grupo de estudiantes de segundo año llevó la teoría de las aulas a una aplicación real en la comunidad. Liderados por los docentes Matías Loinaz y Allan Braz de Ingeniería en Energías Renovables, los jóvenes instalaron un sistema fotovoltaico que servirá como fuente de energía a partir del año próximo y también será un testimonio del potencial de cómo pueden impactar las energías renovables en instituciones del departamento.


Desde UTEC, “nos sentimos muy satisfechos con este proyecto”, expresó Loinaz. Se trata de una instalación fotovoltaica con conexión a la red eléctrica, posible gracias a una donación de la universidad al Liceo Fundación Impacto que “permitirá al centro generar su propia energía para el autoconsumo y volcar el excedente a la red, realizando así un intercambio con UTE”, destacó el docente.

El grupo de trabajo unió a estudiantes de diversos orígenes: Diego Arbiza de Artigas, Agustina Colman de Florida, Luisina Invernizi y Mercedes Olivera de Salto, Mariana Martínez de Montevideo, Milagros Bermúdez de Flores y Juan Tiscordio de Durazno.

Aprender haciendo: el valor de la práctica

La experiencia de los estudiantes refuerza un concepto clave de su formación: no es lo mismo realizar simulacros en un laboratorio que ejecutar instalaciones profesionales que generan un impacto directo y real en una institución educativa.

Para los estudiantes, esta Práctica Preprofesional marcó un hito en su formación. Mariana Martínez destacó la relevancia de salir del entorno académico: “es la primera vez que hacemos algo así”, comentó en relación al trabajo práctico fuera de UTEC. 

Para Agustina Colman “el trabajo en equipo es muy importante, porque con una buena organización y esfuerzo de todas las partes, el resultado es mucho mejor”. La estudiante contó que la primera impresión fue: “somos muchos, esperemos que todos logremos meter mano y aprender”. “Nos imaginábamos la dimensión del trabajo que nos esperaba”, agregó. Agustina relató que lograron organizarse para que todos trabajen y aprendan lo más posible, por ejemplo, “el trabajo de taladrar la estructura generalmente la hacían Juan, Diego y los profes, ya que requería de muchísima fuerza”, resaltó.

La instalación demandó varias instancias de trabajo intensivo en el predio del liceo. Las y los estudiantes participaron desde el diseño, el desarrollo de la instalación y participarán en el proceso de trámite ante UTE para autorizar la instalación, dado que la puesta en marcha se realizará en febrero de 2026. El docente de UTEC Matías Loinaz expresó que fue “una experiencia muy buena para los estudiantes como práctica profesional”. “Son estudiantes del cuarto semestre de Ingeniería Energías Renovables, que terminaron el segundo año de la carrera” pero como el año con más prácticas es el tercero, “estos estudiantes van a llegar con esta práctica hecha, por lo que van a tener otra visión y otro panorama”, comentó. 

En este sentido, la estudiante Mercedes Olivera expresó que esta experiencia le “cambió completamente la perspectiva de la carrera”. Pasar de la teoría a un proyecto real fue el diferencial: “me permitió entender mucho mejor los conocimientos que adquirí durante estos dos años, pero sobre todo me ayudó a entender cómo se piensa y se trabaja en la práctica profesional” y “entendí que siempre aparecen problemas que uno no prevé, y que la clave de ser ingenieros está en tener la capacidad de adaptarse y resolverlos” expresó. La práctica pre profesional fue “muy importante para mi formación, porque realmente me abrió la cabeza y me permitió entender cosas que, de otra manera, no habría aprendido”. Para Mercedes es fundamental que todos los alumnos puedan presenciar un proyecto como este antes de recibirse de tecnólogos. 


Un proyecto con futuro

Loinaz subrayó que este es solo el comienzo de una colaboración que trasciende la obra física y que tanto UTEC como el Liceo se beneficien de esto. Lejos de concluir con la instalación, el proyecto abre la puerta a nuevas iniciativas. Una vez que los paneles estén operativos, el siguiente paso será implementar un “pequeño plan piloto de agrofotovoltaica”, que permitirá aprovechar el espacio y la sombra bajo las estructuras para desarrollar cultivos experimentales, comentó.

El valor de la experiencia no solo se puede ver en el resultado final.

Mercedes contó que se “encariñó mucho con el proyecto”. “Siento que una parte de nuestro trabajo va a quedar para siempre en ese liceo” y destacó que fue justamente el contacto de las Energías Renovables en su liceo lo que la llevó a elegir estudiar en UTEC.

Por eso, “pensar que hoy esa institución va a contar con una instalación fotovoltaica me parece aún más valioso: no solo como proyecto técnico, sino como una forma de acercar estas energías a los estudiantes” finalizó.

Fuente: UTEC

  IR A PORTADA 

Entradas que pueden interesarte