
La edil del Partido Nacional solicitó que el Municipio y la Intendencia incorporen una serie de mejoras al entorno del parque Elías Regules, en el marco del próximo presupuesto quincenal. En un planteamiento que combinó sensibilidad ambiental, memoria cultural y compromiso con la accesibilidad, la nacionalista Analía Quijano propuso en la sesión del jueves 31 de julio de la Junta Departamental de Durazno, una revitalización profunda del entorno natural que bordea el puente sobre el río Yí, en las inmediaciones del parque Elías Regules.
El lugar, muy conocido por vecinos y visitantes de Sarandí del Yí, es, según describió la curul, un espacio natural valioso que hoy se encuentra “en muy malas condiciones”. Con el apoyo de imágenes y videos, Quijano mostró restos de basura acumulada, maderas deterioradas y hasta un viejo televisor que, aseguró, lleva meses abandonado en el sitio. “Es un lugar que debería ser hermoso y que sin embargo se ve triste, apagado”, sostuvo.Más allá de lo narrado, presentó una serie de propuestas concretas. En primer lugar, solicitó que el Municipio se involucre mucho más en las tareas de limpieza del lugar, y que se contemple su adecuación dentro del presupuesto departamental. “No parece que se esté limpiando a diario, ni con la frecuencia que se necesita”, señaló, al tiempo que destacó la importancia del parque Elías Regules como sede de eventos relevantes como la Fiesta del Cordero Pesado.
Su iniciativa va más allá del mantenimiento: propuso también crear una rambla que acompañe el curso del río, habilitar el lugar como paseo público y sumar un componente artístico-cultural mediante una galería de murales o museo a cielo abierto. Esta intervención, afirmó, podría rendir homenaje a figuras como Osiris Rodríguez Castillos, Elías Regules y Fernán Silva Valdés, así como a vecinos que han sido referentes locales.
Entre los aspectos más valorados del proyecto se encuentra la inclusión de una rampa de acceso al río para personas con dificultades de movilidad. Quijano remarcó que, durante el verano, el área suele ser utilizada como balneario, pero las raíces de árboles y las piedras dificultan el acceso seguro al agua para muchos vecinos.
“Es un lugar de encuentro, de mates entre amigos, de familias que lo visitan todos los días”, expresó, y añadió que transformar ese rincón natural sería una forma de mostrar que Sarandí tiene mucho para dar. El pedido fue derivado al Intendente Departamental y al Municipio, con la solicitud de que sea tenido en cuenta en el próximo presupuesto.