El ministro del Interior, Luis Alberto Heber, inauguró, este jueves 15, la cárcel de Tacuarembó, ubicada en el predio de la Villa Policial, en la ruta n.º 31, con capacidad para 150 personas privadas de libertad y una inversión de 50 millones de pesos. La unidad penitenciaria fue trasladada desde el centro de la ciudad, para que cumpliera con los requisitos de rehabilitación dispuestos en el Plan de Dignidad Carcelaria.
En la actividad, acompañaron a Heber el director general de la cartera, Nicolás Martinelli; el titular de la Policía Nacional, Diego Fernández; el director del Instituto Nacional de Rehabilitación, Luis Mendoza; el jefe de Policía de Tacuarembó, John Saravia, y autoridades departamentales.La nueva cárcel fue construida en 10 meses por 15 obreros y cuenta con más de 1.000 metros cuadrados edificados y espacio público de esparcimiento. Con esta unidad se alcanzan las 232 plazas disponibles en el departamento.
En su oratoria, Heber señaló la importancia de trasladar el centro penitenciario fuera de la ciudad para que cumpliera con los requisitos de rehabilitación dispuestos en el Plan de Dignidad Carcelaria y respetar y garantizar los derechos humanos de las personas privadas de libertad.
En ese sentido, sostuvo que con el programa se procura la rehabilitación, ya sea por medio del trabajo, el estudio o la recreación, lo que implica que deba haber instalaciones acordes para desarrollar esas actividades. “Sin una infraestructura adecuada, es imposible trabajar en rehabilitación y reinserción social”, afirmó.
Además, resaltó que esta inauguración representa un hito, ya que este es el primer centro penitenciario abierto en el marco del referido plan y concuerda con uno de los objetivos primordiales de la cartera: eliminar el hacinamiento para luego poder trabajar en una rehabilitación efectiva.
El jerarca explicó que en la actualidad hay unas 14.600 personas en el sistema carcelario, entre mujeres y hombres. Al respecto, dijo que se trabaja en la construcción de un nuevo edificio en el predio del penal de Libertad, con capacidad para 1.500.
Se reformará los módulos 1 y 2 del ex Comcar para albergar a 1.000 reclusos en condiciones dignas, se ampliará la cárcel departamental de Salto y se trasladará las de Artigas y Treinta y Tres hacia las afueras de esas ciudades capitales.
“Una vez que logremos eliminar el hacinamiento, nos enfocaremos en la rehabilitación y ahí trabajaremos en materia de adicciones, salud mental, capacitación y en brindar diversas oportunidades para lograr la reinserción social y laboral de esta población”, aseguró.
Posteriormente, Heber participó en la reinstalación del servicio policial en Paso de las Carretas, cerca del balneario Iporá, zona en la que desde 2014 no había un destacamento. Allí agradeció a los vecinos por el impulso para reinstalar la comisaría y destacó que esta administración inauguró diversos destacamentos con el objetivo de reforzar la presencia policial y ofrecer mayor seguridad a las comunidades rurales. IR A PORTADA