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La investigación, encabezada por la fiscal de Canelones de 1er. turno, permitió identificar al agresor. Durante el allanamiento, el hombre se resistió al arresto, intentó destruir su celular y amenazó tanto a los policías como a la fiscal.
Un hombre de 35 años fue condenado este viernes, a nueve años y diez meses de prisión, por abusar sexualmente de varios menores de edad a los que contactaba a través del popular videojuego Free Fire y de la red social TikTok. El caso expone cómo las plataformas digitales pueden ser utilizadas para manipular y vulnerar a niños y adolescentes.Según la investigación fiscal, el hombre se presentaba bajo identidades falsas -a veces haciéndose pasar por un menor, otras empleando un número argentino- para ganarse la confianza de sus víctimas. Desde su cuenta de TikTok, donde figuraba como influencer, ofrecía regalos, recargas de datos y pertenencia a un supuesto “clan” de jugadores. Luego, trasladaba la conversación a WhatsApp y concertaba encuentros personales.
Las reuniones se concretaban en habitaciones de hotel, donde el agresor obligaba a los adolescentes a mantener relaciones sexuales a cambio de dinero o beneficios virtuales. Utilizaba expresiones manipuladoras como “Mirá que yo te puedo regalar cosas” o “¿No querés pertenecer al clan Gobernantes?”. Los abusos ocurrieron entre diciembre de 2023 y febrero de 2024.
La denuncia surgió en marzo de 2025, cuando la madre de una de las víctimas descubrió el acoso que su hijo sufría y acudió a la Policía. La investigación, encabezada por la fiscal de Canelones de 1er. turno, permitió identificar al agresor. Durante el allanamiento, el hombre se resistió al arresto, intentó destruir su celular y amenazó tanto a los policías como a la fiscal.
El análisis del dispositivo reveló decenas de conversaciones con menores uruguayos y extranjeros, de entre 11 y 15 años, así como fotos y videos de contenido sexual generados por él mismo.
La Justicia lo condenó en proceso abreviado por reiterados delitos de abuso sexual especialmente agravado, violencia privada, grooming, corrupción y acoso telemático, entre otros.
Además de la pena de prisión, quedó inhabilitado de por vida para desempeñar trabajos que impliquen trato directo con niñas, niños o adolescentes, deberá pagar una multa equivalente a 12 salarios mínimos nacionales y fue incorporado al Registro Nacional de Abusadores Sexuales.
