Un sorteo, una casa y una carrera contra el tiempo en Durazno

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Un golpe de fortuna que choca con la cruda realidad de la vivienda popular llegó este jueves a la Junta Departamental de Durazno. El edil Raúl Curbelo del Frente Amplio expuso el caso de Ingrid Harguindeguy, una madre soltera que ganó la casa de sus sueños, pero que podría perderla por no tener donde ponerla.

La situación se desencadenó el 16 de octubre, cuando la señora Harguindeguy recibió una notificación de la distribuidora 'San José' que "la embargó la alegría, la emoción": resultaba ganadora de una casa en un sorteo por la compra de algún alimento. Sin embargo, el premio venía con una condición que convirtió el júbilo en angustia.

Según relató Curbelo, la empresa notificó que "en un plazo de 60 días debe disponer [...] de tener un terreno para depositarle el contenedor". Se trata de una vivienda de 36 metros cuadrados que "viene completamente pronta" para ser instalada. El problema, explicó el curul del Frente Amplio, es que "Ingrid no cuenta con un terreno porque toda su vida la ha peleado alquilando".

La señora Harguindeguy, quien se trasladó desde Ciudad del Carmen a Durazno hace tres años y medio en busca de mejores oportunidades laborales, es jefa de hogar monoparental y cría a su hijo de 12 años. Según la descripción del curul, sobrevive con una pensión alimenticia del menor que "es con lo que asegura en este momento el alquiler de la vivienda que habitan", complementando sus ingresos con trabajos esporádicos de limpieza y cuidado de niños.

"Con eso la va peleando y en forma humilde, pero muy decente va saliendo adelante", afirmó Curbelo, quien visitó a la familia el pasado lunes junto a la edila frenteamplista Ester Rodríguez.

Con el plazo de 60 días corriendo inexorablemente -ya restan menos de 50- el edil hizo un llamado desesperado a la solidaridad institucional. "El gran tema es donde podemos conseguirle a Ingrid un lugar donde poder depositar su contenedor", planteó, sugiriendo que "la Intendencia pueda disponer de algún terreno en algún lugar".

Curbelo enfatizó la urgencia del caso: "Increíblemente si no lo hace, si no tiene en 50 días el lugar donde depositarlo, no recibe el premio, o sea, se quedaría sin su casa"...

En su intervención, contrastó esta situación con otros casos que han llegado a la Junta, señalando que "ante tantos problemas que hemos visto [...] de que han edificado sin permiso, fraccionamiento, sin autorizaciones", esta mujer "que es muy decente y que es muy humilde en este momento necesita de nosotros".

El planteo, que Curbelo describió como carente de "color político", será derivado al señor Intendente y a la Comisión de Derechos Humanos de la Junta, iniciando una carrera contra el tiempo para convertir un sueño en una realidad tangible.



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